jueves, 20 de marzo de 2008

El encarcelado (part. 4)

Jim nos miró con indiferencia, mientras dejaba la comida en el suelo.
-Hoy hay sopa. Por cierto, un tal Jake preguntaba por vosotros dos. Le he dicho que venga mañana en el horario de visita, ¿quién es?
Willy se puso nervioso, y esbozó una sonrisa.
-Es un amigo nuestro, un viejo y buen amigo. Gracias Jim por decirlo.
Cuando Jim se alejó grité. Jake era nuestra salvación. Fue un marino de mi tripulación hacía ya un tiempo. Después abandonó el oficio porque se casó y tuvo hijos. No supe mas de él.
-Capitán, es un momento muy oportuno para que aparezca Jake. Antes de venir aquí le envié una carta comunicándole todo, pero días después oí que había muerto -dijo Willy, mientras tomaba aire, después continuó. -Creo que estuvo unos años trabajando como vicesecretario del Gobernador, usted sabe, que siempre se le dio bien eso de la organización.
-Sí, es verdad. Pero William, por favor, hablame de "tu", ya no soy tu capitán, no sé ni si quiera qué soy.
Agaché la cabeza, había vuelto a pensar en mi mala suerte. Desde que conocí a Bill en mi primer trabajo como marinero a cargo de Capitán Sam, me tuvo envidia. Era una persona despreciable y a mí me cayó muy mal desde el principio.

No hay comentarios: